¿Cuál es el salmo de la mañana?

Aunque no existe un "Salmo de la Mañana" específico en la tradición cristiana o judía, algunos salmos son especialmente apropiados para iniciar el día con inspiración y gratitud. Uno de esos salmos es el Salmo 118, que comienza con las palabras "Alabad a Jehová, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia". A menudo se recita o se medita en la mañana como una forma de dar gracias por el nuevo día y buscar la guía y la protección divina.

Aquí está el comienzo del Salmo 118 (Reina-Valera 1960):

"Alabad a Jehová, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia. Diga ahora Israel, que para siempre es su misericordia. Diga ahora la casa de Aarón, que para siempre es su misericordia. Digan ahora los que temen a Jehová, que para siempre es su misericordia."

Este salmo es una hermosa forma de recordar la bondad de Dios y expresar gratitud por un nuevo día de vida. Te invita a alabar y confiar en la misericordia divina que perdura eternamente. Al recitar o meditar en este salmo por la mañana, puedes encontrar inspiración y fortaleza para enfrentar el día con un corazón agradecido y lleno de confianza en lo divino.

¿Qué rezar por la mañana?

La oración de la mañana es una hermosa forma de comenzar el día con inspiración y propósito. Lo que rezas por la mañana puede variar según tus creencias personales y tu relación con lo divino. Aquí tienes una oración matutina que puedes considerar, pero recuerda que lo más importante es que hable desde tu corazón:

Oración Matutina:

"Querido Dios,

Te agradezco por este nuevo día que me has regalado. En esta mañana, abro mi corazón y mi mente a Tu presencia y Tu guía. Ayúdame a caminar en la luz de Tu amor y sabiduría.

Permíteme ser un instrumento de paz y bondad en este día. Ayúdame a mostrar amor y compasión hacia los demás, a ser paciente y comprensivo en momentos de desafío, y a ver la belleza y la gratitud en cada momento.

Guíame en la toma de decisiones y fortaléceme en la adversidad. Permíteme ser consciente de las bendiciones que me rodean y agradecido por todo lo que tengo.

Que Tu luz brille en mi vida y a través de mí hacia los demás. Encomiendo este día a Tu cuidado y protección.

Amén."

Esta oración matutina es un recordatorio de la importancia de comenzar el día con gratitud, amor y propósito. Puedes personalizarla según tus propias palabras y sentimientos. Lo esencial es abrir tu corazón a lo divino, buscar orientación y fortaleza, y comprometerte a vivir el día con amor y conciencia espiritual.

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