Reflexiones cristianas para hoy 7 de Enero

Esta oración es como un suave susurro de gratitud dirigido al cielo. Al agradecer por el regalo de un nuevo día, reconoces la belleza de cada amanecer como un don divino. Es un recordatorio de la renovación constante que nos brinda la vida.

La cita de Juan 13:34 que compartes es como un faro de luz en tu oración. Aquí, Jesús nos da un mandato que resuena con amor y compasión. El llamado a amarnos unos a otros refleja la esencia misma de la fe, recordándonos que el amor es la guía más noble para nuestras acciones diarias.

Decir "Amén" al final es como sellar esta conexión especial con una afirmación de compromiso. Es un sí a seguir el mandamiento de amar, a permitir que el amor divino dirija nuestras interacciones con los demás.

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